¿Qué pasó con Chiroso Café? Nos pudo el chisme y… vea pues
En estos días, caminando por Urrao, nos pillamos unas hojitas de block pegadas por ahí, como si fueran pistas de una película de misterio. Cada hoja tenía un código QR y una frase que decía:
“¿Por qué cerró Chiroso Café?”
Nos pudo la curiosidad —y el chisme también, no vamos a mentir— así que escaneamos ese bendito código esperando encontrar la gran revelación.
Pero no… el video que se abre es bonito, sí: imágenes del lugar, ambiente cálido, musiquita de fondo y un mensaje que más parece poema que explicación:
“Este cierre representa una pasión desenfrenada, una mezcla de sentimientos muy intensos que nos llevan a concluir que la vida es amor, pasión, decisión, familia, amigos, aliados… pero sobre todo, amor por Urrao y el café.”
¿Y qué más? Nada. No dicen si se fueron, si se reinventan, si vuelven con otra marca o si fue que les dio el arrebato del alma.
Pero eso sí: al final dejan claro que “acá no termina”.
Así que, ¿fue cierre?, ¿pausa creativa?, ¿marketing místico? No sabemos. Pero lo cierto es que Chiroso Café se nos metió en el corazón, y muchos quedamos con ese vacío de no saber qué sigue.
Mientras tanto, nos queda el recuerdo de sus malteadas, el café con alma, el espacio bonito… y la esperanza de que algún día regresen. Porque lo que es Urrao, no sería lo mismo sin ese rinconcito lleno de aroma y cariño.
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